Disciplina y motivación serán la clave para dar un paso más adelante en un encuentro que fue aplazado en su momento y con el que se cierra la primera vuelta para los verdinegros.
El Cáceres Patrimonio de la Humanidad afronta un nuevo reto para seguir mirando hacia arriba en la clasificación este domingo a domicilio contra Palmer Alma Mediterránea Palma.
El pabellón mallorquín de Son Moix acogerá, a partir de las 17:00 horas, el duelo correspondiente a la jornada 15 de LEB Oro, aplazado en su día por los casos covid en la escuadra local y último partido de los extremeños de la primera mitad de la competición.
En rueda de prensa previa, el entrenador del Cáceres, Roberto Blanco, ha pedido a sus jugadores que no se confíen y salgan convencidos de que Palma será un rival muy duro con la motivación extra por jugar.
A su juicio, el encuentro de este domingo es “vital” para la consecución de los objetivos del equipo por lo que les ha reclamado ante este nuevo reto dar un paso adelante, ser fuertes mentalmente, no salir fríos y sin altibajos tan pronunciados.
“Sabemos que es un partido que puede darnos un pequeño empujón para conseguir los objetivos y mirar al frente. Debemos ir muy convencidos de ello”, ha expresado Blanco.
Todo ello tras una semana más larga de preparación en la que se ha puesto el foco en el equilibrio del equipo y en no desviarse del camino, basado en una férrea defensa y mejorando en el rigor ofensivo.
“Me encanta que haya debates en la calle de que el equipo defiende pero ataca mal, porque eso significa que la gente se preocupa y quiere más. Llevamos once victorias, todas trabajadas desde la defensa, y tratamos de conseguir más fluidez y control del ritmo del partido”, ha apuntado.
Así, ha señalado la disciplina y la motivación como claves para un nuevo triunfo a domicilio en tierras insulares frente a un conjunto mallorquín al que volverá el talento de Figueras y en el que destacan nombres como Van Beck, Lundqvist, Pavelka y Kostadinov, que están intentando crecer y buscar su hueco en el escaparate nacional.
“Vamos a enfrentarnos a un equipo que ha cambiado mucho, no tiene que ver con el que iba a ser antes del aplazamiento, y que tendrá algunas ausencias”, ha expresado el entrenador extremeño.
Una situación que también sufrió el Cáceres en Melilla, cuando viajó con siete jugadores profesionales y aguantó dos tercios del partido con opciones, o contra Valladolid, victoria con varios canteranos en el banquillo, y que no convierte el partido en fácil.
“No vamos de excursión a Palma a que nos hagan un pasillo cuando lleguemos. En el baloncesto hay muchos argumentos para contrarrestar los problemas y si nosotros mismos lo hemos utilizado, estoy seguro que en Palma lo harán también”, ha recalcado.
Así, ha mostrado su deseo de que los jugadores verdinegros estén centrados y mentalizados el domingo para llevarse la victoria. “Nos quedan 15 finales y debemos seguir trabajando”, ha dicho el técnico.
“Ganar a Palma vale lo mismo que ganar a Huesca, Granada o GBC, todas valen igual, no hay que hacerlo porque sí, sino por convicción, motivación y tratando de jugar cada vez mejor”, ha sentenciado.
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